sábado, 21 de septiembre de 2013

Un poco de Paris

Un pequeño paseo por Paris,
una ciudad mágica y llena de vida.



El Sena y el puente de Los Invalidos

Moulin Rouge



Conciergerie

Louvre


Louvre
 
Arco del Triunfo


jueves, 5 de septiembre de 2013

Sesión Fotográfica de Aimar

 
 
 
 
Aprovechando el día tan fantástico que amaneció en Oyambre, Aimar posó para la cámara como todo un profesional.
Así da gusto hacer fotos, es un placer cuando el modelo es tan expontáneo.
 
 
 
 
 
 
 
 





 



martes, 3 de septiembre de 2013

Bajó el Raquerillo a la Mar




Cansado de lanzarse al agua de la Bahía,
un día de tantos en los que tocaba el mar,
cuando miraba la perra chica lanzada,
por aquellos que nada parecían necesitar.

Aquel niño, aquel pequeño Raquerillo,
que feliz era mientras llevaba a casa una hogaza de pan,
y observaba los rostros frágiles
 y menudos de sus hermanos más pequeños.

Por fin un día,
pensó y deseó sentir de verdad la mar,
y andando hacía ella avanzó silencioso;
mientras el sol del atardecer lo acompañaba,
hundiendo sus pies en la arena, tocaron sus tobillos el frio mar,


Supo entonces que no dejaría de amarla jamás,
acompañando siempre por el sol y la arena,
desde ese día
que bajó el Raquerillo a la mar.

(Texto de :Olga Mena ©)
(Foto: Olga Mena © )



Con el nombre de Raqueros , se conoce a los niños que el Siglo XIX y principios del Siglo XX, frecuentaban los muelles de Santander. Además de sobrevivir gracias a los pequeños hurtos en los barcos, podían llevar dinero a casa, gracias a las monedas que les lanzaban los turistas al mar, y que ellos rescataban lanzándose a por ellas y buceando.
También en ocasiones se les pagaba para que se sumergieran a recoger los objetos que se habían caído al fondo de la Bahía.

Hoy en día existe en la bahía de Santander una escultura en honor a los queridos Raqueros.

Aquí mi pequeño homenaje a ellos.